La amaba con sus infinitos ojos verdes, con el balón en las manos y la sonrisa en el rostro. La amaba aunque ella nunca lo supo, aunque nunca fui correspondido y la devoción era una confesión a mi alma. La amaba cuando se fue, cuando me dejó unos versos nunca escritos pero que habitaban las horas del día y se hacían poemas eternos en el cuaderno de su ausencia. Hay amores que solo duran lo que dura una mirada perdida, amores que habitan en lo más profundo del corazón y nunca pueden escapar de su lúgubre encierro, poco importa, porque hay mujeres a las que debes amar en absoluto silencio, amores que se acurrucan en la soledad para que nunca te sientas solo. La amaba como solo se pueden amar los sueños inalcanzables, como solo se ama una vez en la vida. A veces aun puedo escuchar el sonido del balón impactando contra el suelo cuando piso una pista de baloncesto, cierro los ojos y escuchó la algarabía de su risa resonando en lo más hondo de mi felicidad, puedo sentir como sus manos me rozan y un escalofrío recorre la espina dorsal de un pasado hecho de ella. El silencio es una partitura donde están escritos todos sus recuerdos, y aunque se fue hace ya largo tiempo aun puedo sentir el perfume que desprendía su cuerpo en cada entrenamiento. No hubo besos, ni caricias, ni palabras bonitas que adornasen el paso de los días, solo hubo miradas, miradas encendidas que prendían fuego al mismo deseo, miradas escondidas que recitaban amores imposibles, miradas tan hermosas que daban envidia a la propia belleza. Aun recuerdo su forma de caminar, sus movimientos perfectos en el campo de juego y sus lágrimas en la derrota. Ahora que habito un mundo perfecto suelo tumbarme boca arriba en el centro del campo de juego y dejo que mi fantasía se llene de recuerdos, que los gritos pongan banda sonora al silencio, que su belleza rezume por cada uno de los poros de mi cuerpo. Sé que nunca volverá pero también sé que nunca se fue. Sus gestos pasean a diario por mi memoria cuando mi retina la mira en las habitaciones del pasado, cuando un beso pasa de soslayo y se posa en mi mejilla, cuando miro su camiseta colgada en el armario.
martes, 20 de abril de 2021
RELATOS INCONFESABLES
SE QUEDÓ A VIVIR EN MI RETINA,
A JUGAR A BALONCESTO CON LOS SUEÑOS,
DEJÓ EL PERFUME DE SU JUEGO
EN LOS CAMPOS QUE HABITAN MI MEMORIA.
AHORA QUE SIEMPRE JUEGO SOLO
SUELO CERRAR LOS OJOS Y SIENTO
COMO SU FELICIDAD ERAN BESOS TÍMIDOS
ESCRITOS CON UN BALÓN Y UNA CANASTA.
.
viernes, 9 de abril de 2021
BESOS INVENTADOS
Besos aparcados en los labios
besos que se dan con la mirada,
besos que se recitan con las manos
besos que acarician la memoria.
Besos que cabalgan por la fantasía,
que hacen cosquillas en los dedos,
besos que son dragones colosales
custodiando la belleza de tu cuerpo.
Besos que se esparcen por el cielo,
golondrinas que juegan con su vuelo
en los acantilados imposibles del deseo
donde habitan las caricias prohibidas.
Besos que pasean por la memoria
y dan forma perpetua a los recuerdos,
besos que suplican un tímido permiso
para viajar a los labios del olvido.
Besos que llegan de improviso,
en silencio, sin hacer apenas ruido,
que se quedan a vivir en el alma
para dar forma a los amores eternos.
besos que se dan con la mirada,
besos que se recitan con las manos
besos que acarician la memoria.
que hacen cosquillas en los dedos,
besos que son dragones colosales
custodiando la belleza de tu cuerpo.
golondrinas que juegan con su vuelo
en los acantilados imposibles del deseo
donde habitan las caricias prohibidas.
y dan forma perpetua a los recuerdos,
besos que suplican un tímido permiso
para viajar a los labios del olvido.
en silencio, sin hacer apenas ruido,
que se quedan a vivir en el alma
para dar forma a los amores eternos.
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