jueves, 27 de febrero de 2025

MOMENTOS TRÉMULOS

      Ya no me quedan corazones rotos, ni besos robados, ni miradas perdidas que desean ser encontradas. Ya no me despierto empapado en soledad y rodeado de silencio, ni escribo con lágrimas poemas heridos en la almohada, ya no me quedan palabras en mis labios ni reproches en el alma. He dejado que el tiempo se haga un ovillo y me he dormido entre las hebras del destino, he roto todas tus cartas y he borrado todos los mensajes del whatsapp, y aunque me duele la vida sé que hay que dejar que los sueños se vayan, que las risas se apaguen, que la distancia cure las heridas, que el olvido te abrace despacio. Puede ser que algún día nuestras miradas se crucen, nuestros corazones se hablen, que pueda dejarte una sonrisa en el buzón de tu casa. No lo sé, y tampoco es algo que ahora importe, cuando tú eras todo mi mundo yo no tenía cabida en el tuyo, cuando dibujaba corazones en la ventana de tu coche y mis besos correteaban por tu mirada a ti nada de eso te importaba, y ahora que no estoy, que vivo de prestado en los besos sin alma de mujeres sin nombre sé que la felicidad no está en los momentos que hemos compartido, en las calles silenciosas y vacías donde nos abrazaba el frío y quería sentir el calor de tu sonrisa, en las largas esperas donde no esperaba nada, en las palabras que no destilaban una pasión desbordada. Ya no me quedan versos paridos de mis entrañas, ni mis manos añoran el calor que manaba de las tuyas, ya no espero una palabra, una caricia, una mirada, un beso que de sentido a mi mundo, que me haga feliz por tan solo un segundo. Paseo solo, por los rincones de la tranquilidad, por los campos de sueños que ya no me hacen soñar, por los bares que, una vez, tú y yo solíamos frecuentar, y a veces cuando me alcanza el aliento de la soledad me siento en aquella mesa de la esquina donde solíamos desayunar, y en la más estricta intimidad dejo que mis recuerdos me acompañen sin más, dejo que la nostalgia se emborrache para que te pueda olvidar. 
     Ya no me quedan canciones que me hagan llorar, ni tardes en las que el tiempo se diluía entre miradas y risas, ni tan siquiera me queda Sabina para escuchar un "sin embargo te quiero" para decirte que tardé en olvidarte "19 días y 500 noches", ya no recorro esa autopista al infierno porque no tengo infierno donde llegar, porque no me importa donde mi alma pueda acabar, porque no hay corazón alguno al que quiera regresar. Me pierdo en las caderas de los sueños que pasan pero nunca se van a quedar, en la melancolía de los poetas que no saben escribir estrofas de amor, en las damas de hielo que nunca sabrán que mi corazón está hecho de fuego. Ya no dejo besos en los rincones de la espera para que tú los puedas encontrar, ni abro la puerta esperando que tu sonrisa me pueda abrazar, ya no dejo que mi sonrisa se escape y vuele tras de ti, que cada mirada te desnude y cada palabra te acaricie. Ya no siento ese frío en mis entrañas que me hacía temblar, ni derramo lágrimas sin saber por qué tenía que llorar,  Me siento en aquel viejo sofá donde te solía abrazar y ya no busco la felicidad, tan solo cierro los ojos y vuelo de nuevo al país de nunca jamás, a los besos que nunca más me volverán a dar, a los bares de copas y a los sueños que persigo en los páramos de la intimidad.


YA NO PERSIGO AMORES IMPOSIBLES
MUJERES QUE DEVORAN LA FANTASÍA
BESOS PERDIDOS EN LA MEMORIA
PLACERES INTIMOS QUE DEN SENTIDO A MI VIDA.
AQUELLOS OJOS QUE ME BESABAN
CON LA INOCENCIA DE UNA CARICIA PROHIBIDA.



sábado, 15 de febrero de 2025

LA BELLEZA DE LO INTANGIBLE

      Me he perdido en algún lugar del camino, en los entresijos de mil vidas dejé la mía, quise vivir en tantos corazones que al final no me quedé en ninguno y perseveré demasiado en la necesidad de pasiones que nunca necesité. He paseado por los ojos celestes de caprichos que me dejaron en los huesos, me acurruqué en ese cariño volátil que se escapa de las manos y cuando quieres acariciarlo ya no queda nada. He batallado por la belleza de lo intangible, por mujeres sin alma, por sonrisas vacías, por amores que nunca pude tener y me dejaron tatuada la melancolía en la piel del recuerdo. He deseado que el deseo me abrazase, que una mirada me dijese que me amaba, que unas manos inocentes jugasen a juegos prohibidos con mi corazón. He perdido lo que siempre tuve y lo que nunca llegué a tener, y ahora que viajo solo he dejado atrás la soledad, no sé donde estoy ni donde llegaré, con quien me encontraré y si merecerá la pena compartir un pedazo de mi cariño con las damas de noche que hallaré en este camino. Me he perdido, tal vez me perdí hace mucho tiempo, cuando cada palabra, cada gesto, cada mirada era una oda entonada al vacío, cuando escribía un compendio sobre amores imposibles y tú solo leías palabras minúsculas, cuando me exilié de mi vida para construir la tuya. He vivido enamorado de la belleza de lo intangible, atado al cariño que no se puede tocar, al deseo que no se puede alcanzar, a corazones tan distantes que necesitaría cientos de años luz para poderlos besar. No echo de menos nada pero me falta todo lo que tenía, no era mucho pero yo me conformaba con muy poco. Hay momentos en los que desearía volver, en los que me quedaría mirando tu belleza y nada más importaría, momentos en los que querría decirte lo mucho que te quiero y que eres mi necesidad, pero cada paso, cada cruce, cada encuentro me dice que seré más feliz sin ti, que las batallas que no puedes ganar no las debes luchar, que las mujeres que nunca te van a amar es mejor dejarlas marchar y que solo sean sueños que nunca vas a alcanzar, pedazos de felicidad rotos que es imposible reparar. Me he perdido persiguiendo tus silencios, la fría belleza que manaba de cada uno de tus gestos, enredado en un amor no correspondido, y ya no quiero volver, no necesito volver, encontrar el camino que perdí, mirarte a los ojos y contemplar el inmenso vacío, buscar tus besos y saber que se han ido, escribir versos que para ti no tienen ningún sentido. Me he perdido, lo sé, pero cuando vives atado a la belleza de lo intangible debes saber que la tristeza te alcanzará más tarde o más temprano, que no habrá un corazón para refugiarte cuando llegue el frío, que te has enamorado de la soledad.


TE HE BUSCADO EN MIL MUNDOS, 
EN LA INMENSIDAD DEL UNIVERSO,
EN GALAXIAS TAN LEJANAS 
QUE SOLO EL CORAZÓN PUEDE LLEGAR,
HABITÉ LA FELICIDAD QUE SE ENCUENTRA EN EL CAMINO
LAS RISAS DE PASO Y LOS BESOS PERDIDOS,
Y CUANDO LLEGUÉ A LAS PUERTAS DEL DESTINO 
NO ENCONTRÉ LA MUJER QUE BUSCABA
TAN SOLO HALLÉ A MIS SUEÑOS MALHERIDOS.