miércoles, 19 de abril de 2017
Me aferro al silencio para escuchar tu voz, al frío de la distancia para habitar en el calor de tu recuerdo, a la ausencia de tus manos para encontrar la compañía de tus caricias. No estás pero te siento en la memoria de mi piel, en el perfume de las habitaciones vacías que conservan la fragancia de tu risa, en la melancolía que hace el amor a diario con tus besos inventados.
martes, 4 de abril de 2017
IRINA, DESEO Y CARICIA.
Persigo la sombra que dejo tu amor en el desierto de mi deseo, las palabras que se hicieron agua y saciaron mi sed de ti, las noches manchadas de estrellas donde la luz era el espejo de tus ojos. Soñoliento, perdido como un niño alejado de tus brazos, como el silencio que se arrodilla ante la ausencia y llora poemas sin nombre ni voz. Latidos fugaces que rechinan tu nombre cuando rozan el pensamiento y dejan una marca indeleble de amores perpetuos. Mis labios elevan plegarias a un cielo caduco donde yacen los esqueletos de corazones que nunca encontraron el amor, son tus besos estrellas fugaces que surcan el universo de la pasión, pequeños poemas hechos de saliva que se derriten en la boca de la melancolía. No estás, tus pechos se visten de ausencia y dejan un murmullo casi imperceptible de besos cálidos que pasean por su excelsa belleza, de huellas diminutas que dejaron mis labios cuando el tiempo no perecía en los helados jardines de la distancia. Eres musa de mis versos, dama cautiva en mis recuerdos, heroína en los campos de batalla de mi dormitorio, doncella descocada en mi imaginación y suave brisa que acaricia las costas de un corazón que te sueña de diario. Las palabras se marchitan en los huecos que dejaron tus caricias, en las insondables lágrimas que te buscan en la palidez de mis mejillas, en unas manos que buscan consuelo y solo encuentran ausencias. Te amo, y la distancia tan solo es un instante que con gusto consumiré para traerte hasta mi cuerpo y arroparte con mis besos, un universo de placeres degustados por el paladar exquisito de quien solo quiere un amor sin fecha de caducidad, un laberinto de sentidos donde cada deseo es un roce en las mismísimas entrañas de la felicidad.
EL UNIVERSO ESTÁ ENCERRADO EN TU SONRISA
Y LA FELICIDAD EN CADA CURVA DE TU CUERPO.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)