No puedo olvidar tus ojos, el color añil de tu mirada perdida en el horizonte de un amor dulce. La ternura que se deshace cuando tu sonrisa queda suspendida en el aire para dar armonía a la belleza de tu rostro. Las manos donde se cobija el deseo y se hace tormenta cuando roza las costas de mi cuerpo. Tus palabras que se tornan caricias tibias en la piel de un corazón que se alimenta con tu nombre. El aliento que dejan tus suspiros cuando huyen de tus labios para vivir en las fronteras de los míos. El delicioso rumor de tus besos inundando los parajes íntimos de la pasión desbordada, dejando sus huellas diminutas de cariño en el mapa de la felicidad. El perfume que impregna tu ropa y se esparce por mi memoria cuando paseas por mi vida y dejas la impronta de tu risa. No puedo olvidar que solo tenía que cruzar la habitación para estar a tu lado y ahora debo recorrer el mundo para sentir el latido de tu corazón abandonado. La dulzura que se derrama por mi pensamiento cuando contemplo la placidez de tu sueño y no puedo dejar de esbozar una sonrisa, y no puedo contener el deseo de dejar una caricia en la tersura de tus mejillas sonrosadas. Los paseos que se vestían con estrellas y el calor de tu regazo donde abandonaba mis sentidos. El sonido de tus pasos anunciando el esplendor de tu belleza y los silencios que presagiaban el regalo de tus besos. No puedo olvidar que tu ausencia se disfraza de traviesa fantasía y que aún en la distancia sé que solo eres mía.

NO PUEDO OLVIDAR QUE MI HOGAR ESTÁ EN TU CORAZÓN
Y MI FELICIDAD EN LA DULZURA DE TUS LABIOS
No hay comentarios:
Publicar un comentario