Te beso sin que te percates de ello, cada mañana cuando tú no miras, cada tarde cuando andas distraída por el salón, cada noche cuando duermes en el sofá. Te beso cuando no estás y cuando estás te beso aún más. Te beso con el silencio que revolotea incesante como una libélula entre los dos, en las escaleras cuando bajas con la dulzura dibujada en tu semblante, en el campo cuando crees que no te miro pero mis labios saben siempre donde estás. Te beso cuando nuestras manos se rozan, y te beso cuando no puedo dejarte de mirar. Te beso cuando la mesa está puesta y mientras te paso el pan me dejas tu sonrisa, cuando te vas y desde la puerta de tu casa me regalas un adiós, cuando pienso en ti y sin darme apenas cuenta soy feliz. Te beso cuando la distancia es un muro infranqueable, cuando el rubor tinta tus mejillas con una belleza inusitada, cuando entro por la puerta y escucho el rumor de tus pasos. Te beso cuando me miras de soslayo y tus ojos dibujan con trazo muy suave el cariño, cuando un suspiro se escapa de tu alma y revolotea en el abismo de mis entrañas, cuando suena el teléfono y se escucha el eco de tu voz. Te beso cada vez que las lagrimas pasean su cristalina amargura por tu rostro, cada vez que te vence la derrota y solo piensas en llorar, cada vez que se te cae un sueño y yo lo vuelvo a recoger. Te beso cuando bailas bajo la lluvia como una loca encantadora, cuando te abrazo y siento el calor de tu cuerpo, cuando tu ternura se pasea por las veredas de la melancolía. Te beso y te besaré siempre, sin importar allá donde puedas estar, allá donde la vida te pueda llevar.

HAY BESOS QUE SE DAN CON LA MEMORIA
BESOS QUE DURAN TODA LA VIDA
BESOS QUE SE ESCRIBEN CON LOS OJOS
PERO SE RECITAN CON LOS LABIOS.
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