lunes, 23 de febrero de 2015

TEOREMA DE LOS CORAZONES ROTOS (POSTULADO PARA LA FELICIDAD)

El mundo está lleno de tragedias, de soledades inhóspitas y lágrimas que recorren la senda de lo inesperado. La vida es un cúmulo de momentos robados y placeres contenidos que , a veces, estallan en una sinfonía de colores que dan sentido al tiempo. Somos esclavos de nuestros apetitos y siervos de nuestras necesidades. Cuando nos despojamos de todo lo superfluo y el deseo se desnuda es cuando nos hallamos más cerca de tocar la felicidad. Es ese momento íntimo en el que mi pensamiento juega con tu memoria y paseamos juntos por ese patio tibio que son nuestros recuerdos. No son necesarias las palabras, solo una miríada de miradas que lo dicen todo cuando se cruzan en lo más hondo del alma. El universo está hecho con las manos de una mujer que recorre el infinito y solo se detienen a soñar caricias, a explorar los paraísos perdidos que dan forma a la felicidad. No hay tristeza que pueda vencer a un beso, ni melancolía que derrote a la pasión cuando esta se escribe con los labios encendidos que ofrecen deleites diarios. No es necesario alimentarse de corazones podridos cuando el amor es una fruta madura y sabrosa que sacia todos tus apetitos, no hay que rebuscar entre la basura sentimientos rancios que apestan la alegría y solo dan nauseas cuando pruebas la insipidez de su nostalgia. La vida está hecha de sabores que acarician el paladar y se toman aderezados con la dulzura de mujeres que no dicen nada pero te ofrecen el cosmos que contienen sus caderas. Hay besos tan dulces que empalagan la vida con sonrisas, que acarician tus anhelos cuando pasan por tu cuerpo y sacian ese apetito diario de amores correspondidos. La fatalidad se escribe cuando rozamos mentiras que pasean su altiva dejadez por las horas del día, y alimentamos nuestros empeños con ilusiones romas que se mueren de hastío en juegos de azar, donde antes de jugar, ya hemos perdido la felicidad. La verdad no acepta apuestas, juega solo por jugar, porque en el juego del amor, como en la vida, lo más importante es disfrutar de los placeres prohibidos que han tocado a la puerta de tu felicidad, que quieren jugar con tu corazón por toda la eternidad.
El mundo está lleno de alegrías, de compañías preciosas y sonrisas que pasean por los senderos de la vida y transforman la áspera melancolía en deliciosos bocados de perfumada fantasía.


NUNCA OLVIDES QUE NUNCA TE OLVIDO

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