domingo, 15 de junio de 2014
Me muero, no porque no estés sino porque te has ido. Y en mi terca soledad solo me queda un sueño, soñar. Me muero, no porque esté solo sino porque tú no estás conmigo. Y en el silencio solo escucho el eco de tu risa. Me muero, no de pena sino por la ausencia de tu alegría. Y cuando cierro los ojos solo veo tus mohines jugando con tu nostalgia. Me muero, sí, me muero, sé que no te importa, ¿ porque habría de importarte?, huiste con mi corazón entre tus manos y mi amor escondido en tus labios. El día que deje de morirme será el día que dejes de importarme, y cuando eso suceda sonarán campanas de agonía en tu vida por un amor que ha muerto en el olvido de tu alma. No derramarás lágrimas pero un sabor a pena infinita horadará tus entrañas, porque cuando un amor se muere dos corazones mueren con él.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario