martes, 17 de junio de 2014
YO TE ENSEÑÉ..............
Mi entendimiento vuela en pos de recuerdos marchitos, pasea por paraísos donde el sexo huele a poesía, donde un orgasmo nunca vence a la melancolía. Busqué en el cajón del pasado tus besos perdidos, rebusqué porque no recordaba que murieron en la aridez de tus labios, que esos besos se pudrieron en la tristeza de tus escuálidas manos. Es extraño que en mis sueños vivas perenne, pero cuando despierto prefiero no verte. Todas tus imágenes murieron en la soledad de un amor que embarrancó en un arrecife hecho de celos, y poco a poco se hundió en el mar del olvido. Sus restos yacen en la profundidad de un corazón vacío, devorado por los escualos de un egoísmo que me regalaste una mañana de primavera. Morir de amor es hermoso, pero morir de olvido es trágico. El tiempo ha escrito esquelas con tu nombre en los sueños que hacen las esquinas, y ya cuando muero no es por amor, porque tú me enseñaste que hay amores que matan, amores hechos con mentiras piadosas que cuando acarician hieren el alma. Amores sin corazón que solo viven atados a la razón, y eso, mi vida, no es amor. Yo te enseñé a besar sin labios, a acariciar con miradas lascivas, a recorrer el cuerpo del deseo con tu lengua hecha saliva. Yo te enseñé que el amor no se compra con celos, que en un suspiro habitan miles de anhelos. Yo te enseñé que el amor hace visitas de diario, que se viste con el traje de la locura y hace por doquier cien travesuras. Yo te enseñé que si que se puede morir de amor, te enseñé que hay amores que viven para siempre en el corazón, y eso, mi vida, si es amor. No sé en que lugar del camino lo olvidaste y vendiste tus encantos al peso, donde perdiste tu alma por un racimo de calientes excesos. No lo sé, ni lo quiero saber, porque mi amor murió contigo, y en su tumba tan solo se puede leer: Aquí yace un corazón sin dueño, murió de amor, por favor que nadie lo despierte de este su sueño".
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario